Posiblemente la foto le sirva para verificar que, efectivamente, el coche alcanza la velocidad prometida por la marca... y un poco más, ya que está auto-limitado a 250km/h (aunque dicha restricción es muy fácilmente anulable).
La DGT ha publicado en su página web este pdf, donde se anuncia que la infracción es considerada como delito contra la seguridad del tráfico:
10 de febrero de 2006.- Agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil que realizaban un control preventivo de velocidad detectaron un vehículo cuando circulaba a 260 kilómetros por hora.
El hecho se produjo a las 17,41 horas de ayer en el punto kilométrico 128,800 sentido Burgos en el término de Villasandino, de la carretera A-231, que une León y Burgos, en un tramo en que la velocidad máxima permitida es de 120 km/h.
Como podemos observar el la siguiente foto, todo tiene su explicación... un Seat León FR amarillo le iba dando largas a 255km/h
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